Que lo embalsame
Juan José Millás 30.08.2017 | 05:30El texto era magnífico desde el punto de vista del encargo, quién lo duda. Pero le faltaba elaboración. Tal es el peligro de nuestros días, la falta de elaboración por las ganas de cagarnos rápidamente en todo. Y es que lo de Macron, nuestro héroe político y sentimental, es una categoría, aunque haya ido a parar al cajón de las anécdotas. Significa que hay que ser un auténtico desgraciado para querer llevar a cabo en Francia una reforma laboral como la que Rajoy perpetró en España y gastarse a la vez 26.000 euros en afeites. Hay que ser un perfecto sinvergüenza, un tipo sin escrúpulos, un desfachatado, seguramente un facha. ¿En qué rayos pensaba este sujeto mientras le ponían en la cara los colores que ha sacado a todos los que recomendaron votarle? ¿Continúa habilitado un cínico de tal calibre para gobernar Francia? Sin duda, no, pero él no ha venido para gobernar, sino para hacer el caldo gordo a los poderes financieros. Me cago en el caldo gordo.
Fuentes del Elíseo aseguraron que existe la voluntad de reducir sustancialmente esa tarifa. Pues nos cagamos también en las fuentes. Que sigan pagando lo mismo al maquillador, pero que lo embalsame. Punto.